La absorción de nutrientes es el proceso mediante el cual el cuerpo absorbe sustancias esenciales de los alimentos, como vitaminas, minerales, proteínas, grasas y carbohidratos.
Este proceso ocurre principalmente en el intestino delgado, donde los nutrientes se transportan a través de las membranas mucosas al torrente sanguíneo y se entregan a las células, que los utilizan para la producción de energía, la regeneración y el mantenimiento de las funciones normales del cuerpo. La absorción adecuada de nutrientes es crucial para la salud, porque incluso la dieta más equilibrada puede resultar insuficiente si el cuerpo no puede absorber eficazmente las sustancias aportadas. Los factores que afectan la absorción incluyen la salud del sistema digestivo, la presencia de enzimas apropiadas, la microbiota intestinal y la forma en que se preparan los alimentos.
Algunos nutrientes, como las vitaminas A, D, E y K, se absorben mejor en presencia de grasas, mientras que otros, como la vitamina C, mejoran la absorción del hierro. Mantener un sistema digestivo saludable, comer las combinaciones adecuadas de alimentos y evitar los disruptores de la absorción, como los alimentos procesados y el exceso de azúcares refinados, favorece la absorción eficiente de nutrientes, lo que se traduce en una mejor salud y bienestar.